Daniel Veronese, el genial teatrista argentino, ha dejado una marca indeleble en el mundo del teatro a través de su obra y su libro «La Deriva», editado en 2000 por la editorial Adriana Hidalgo. En este artículo, exploraremos en detalle cada uno de los 13 auto-mandamientos de dirección de Veronese, destacando su significado y relevancia en el contexto teatral contemporáneo.
13 Auto-Mandamientos de Dirección Teatral

A continuación los 13 mandamientos de Veronese, esperamos te sean útiles.
Sabotear la expectativa del espectador
El primer mandamiento de Veronese aboga por desafiar las expectativas preestablecidas del espectador, llevándolo por caminos inesperados y sorprendentes. Al romper con la previsibilidad, el director puede mantener la atención del público y crear una experiencia teatral única y cautivadora. 1
Beneficios:
- Genera un mayor interés y participación del público.
- Crea experiencias teatrales memorables y distintivas.
- Fomenta la innovación y la originalidad en la dirección teatral.
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Ser claro sin ser superficial
Este mandamiento pide a los directores que eviten la superficialidad en su trabajo, mientras comunican sus ideas de manera clara y accesible. La claridad garantiza que el mensaje del espectáculo llegue al público sin perder la profundidad y complejidad artística que lo caracteriza.
Beneficios:
- Facilita la comprensión y conexión emocional del público.
- Evita confusiones y malentendidos en la interpretación de la obra.
- Permite que el público aprecie la riqueza y sutileza de la trama.
Ser ambiguo sin ser obscuro
La ambigüedad en el teatro puede permitir que los espectadores interpreten la obra de diversas maneras, enriqueciendo así la experiencia teatral. Sin embargo, el uso excesivo de la oscuridad podría alejar al público. Veronese anima a los directores a encontrar un equilibrio entre lo ambiguo y lo obscuro.
Beneficios:
- Estimula el pensamiento y la interpretación creativa del público.
- Agrega profundidad y misterio a la obra sin alienar al espectador.
- Permite que la obra tenga múltiples capas de significado y apreciación.
Incomodar
El teatro es un espacio donde se pueden explorar temas incómodos y desafiantes. Veronese anima a los directores a confrontar al público, sacudiendo sus emociones y despertando nuevas perspectivas.
Beneficios:
- Provoca reflexiones y debates sobre temas relevantes y controvertidos.
- Crea una conexión emocional más fuerte entre la obra y el espectador.
- Rompe con la complacencia y la apatía, generando una experiencia teatral más impactante.
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Conferir imprecisión a las formas que se presenten demasiado estables
Este mandamiento aborda la necesidad de cuestionar y desafiar las formas establecidas en el teatro. Al introducir elementos de imprecisión, el director puede romper con lo convencional y abrir el camino para nuevas posibilidades creativas.
Beneficios:
- Fomenta la experimentación y la creatividad en la dirección teatral.
- Rompe con la rigidez y permite que la obra evolucione con el tiempo.
- Alienta la búsqueda de nuevas formas y estilos teatrales.
Saltar al vacío con el propósito de establecer nuevos valores
Aquí, Veronese insta a los directores a asumir riesgos y explorar territorios desconocidos. Al aventurarse en lo desconocido, los directores pueden descubrir nuevas formas de expresión y crear un impacto duradero en el mundo del teatro.
Beneficios:
- Abre oportunidades para la innovación y la evolución artística.
- Genera una identidad distintiva para el director y su obra.
- Inspirará a otros artistas a seguir explorando nuevos caminos.
Simplificar la expresión
A pesar de la complejidad que puede tener una obra teatral, Veronese sugiere que el director debe buscar una expresión que sea accesible y fácil de entender para el público. La simplicidad no implica banalidad, sino una forma de conectar emocionalmente con la audiencia.
Beneficios:
- Facilita la conexión emocional y la empatía del público hacia los personajes y la trama.
- Hace que la obra sea más accesible para audiencias diversas y amplias.
- Destaca la esencia y el mensaje central de la obra sin distracciones innecesarias.
Romper la magia para volver a crear estados de credibilidad
El teatro, como arte, puede jugar con la ilusión y la magia para transportar al público a mundos imaginarios. Sin embargo, Veronese sugiere que es importante romper esa magia en momentos clave para reestablecer la conexión con la realidad y generar una mayor credibilidad en la trama.
Beneficios:
- Crea momentos impactantes y sorprendentes para el público.
- Evita que la obra se vuelva predecible y monótona.
- Facilita la identificación y empatía del público con la realidad representada.
No resolver. Nada de guiños o moralejas
En este mandamiento, Veronese desafía la noción de una conclusión perfectamente atada en una obra teatral. Al evitar soluciones simplistas o moralejas, los directores pueden dejar espacio para la reflexión y la interpretación personal del espectador.
Beneficios:
- Estimula el pensamiento crítico y la participación activa del público.
- Permite que la obra permanezca abierta a diversas interpretaciones.
- Genera un mayor impacto emocional y duradero en el espectador.
Sin disolver. Incluso disolver las formas puras una vez halladas
Este mandamiento sugiere que los directores deben estar dispuestos a deconstruir y reconfigurar sus propias ideas y formas artísticas, incluso cuando parezcan estar bien establecidas. La evolución constante es esencial para mantener el interés del público y seguir siendo relevante en la escena teatral.
Beneficios:
- Fomenta la renovación y la frescura en el trabajo del director.
- Evita que la obra caiga en la monotonía o la repetición.
- Mantiene viva la pasión y el compromiso del director con su arte.
Romper siempre lo que se puede hacer con facilidad
Veronese aboga por desafiar lo fácil y cómodo en la dirección teatral. Al atreverse a romper con lo conocido, los directores pueden descubrir nuevos horizontes creativos y alcanzar nuevas alturas en su arte.
Beneficios:
- Impulsa a los directores a superar sus límites y alcanzar nuevas metas.
- Genera obras teatrales únicas y valientes que se destacan entre la multitud.
- Inspira a otros artistas a atreverse a romper barreras creativas.
Producir más catástrofes
Este mandamiento puede ser desconcertante a primera vista, pero en el contexto teatral, se refiere a la necesidad de enfrentar situaciones caóticas y desafiantes para lograr una mayor profundidad y autenticidad en las obras.
Beneficios:
- Abre la posibilidad de explorar temas y situaciones emocionalmente intensas.
- Despierta una respuesta visceral y emocional en el público.
- Empuja al director y al elenco a dar lo mejor de sí en momentos desafiantes.
Poner en duda los principios indubitables del arte
El último mandamiento de Veronese insta a los directores a cuestionar incluso los principios más establecidos del arte teatral. Al hacerlo, pueden desafiar la tradición y buscar nuevas formas de expresión y significado en el teatro.
Beneficios:
- Fomenta la innovación y la evolución continua del teatro como arte.
- Contribuye al enriquecimiento y la diversidad de la escena teatral.
- Inspira un espíritu de búsqueda y aprendizaje constante entre los directores.
Conclusión
Los auto-mandamientos de dirección de Daniel Veronese son una guía valiosa para los directores teatrales que buscan trascender lo convencional y crear obras que impacten y provoquen al público. Al adoptar estos principios en su trabajo, los directores pueden abrir nuevas puertas creativas y dejar una huella perdurable en la escena teatral contemporánea. La audacia de Veronese, su habilidad para desafiar lo establecido y su compromiso con la innovación lo convierten en un verdadero «enfant terrible» del teatro. Siguiendo sus mandamientos, los directores pueden explorar nuevas fronteras artísticas y enriquecer la experiencia teatral para el público y ellos mismos.